Desde la tierra de Don Bosco quiero compartir con ustedes queridos hermanos nazarenos, la riquìsima experiencia de comuniòn y de Familia, que por gracia de Dios hemos podido vivir Gracielita y yo, en la Consulta Mundial de la Familia Salesiana.

Han sido jornadas muy intensas vividas desde la oraciòn , la Celebraciòn Eucaristica, los encuentros generales y grupales, la presentaciòn y diàlogo con don Morand Wirth sobre la espiritualidad de san Francisco de Sales que fue de una sencillez y al mismo tiempo gran profundidad, las orientaciones del Rector Mayor don Angel Fernàndez, y sobre todo el compartir la vida y misiòn de cada uno de los grupos que integran esta gran Familia.

Es importante subrayar la presencia de los 32 grupos que la constituyen y còmo se constata la comuniòn y el sentido de Familia que se experimenta.

İCuànta riqueza y gracia del Espìritu Santo que nos hace uno en la diversidad de los distintos carismas, en la unidad de la misma Familia! Porque nos une el amor que viene de Dios y que es lo ùnico que da sentido y valor a todas las cosas.

El Rector Mayor ha recalcado el amor mariano y a Don Bosco de todos los fundadores de las distintas ramas de este gran àrbol salesiano. Y nos llama a crecer sobre todo en la identidad del proprio carisma y en la comuniòn entre todos, manifestando asì la unidad en la diversidad de los distintos grupos, como verdadero fruto del Espìritu que nos hace uno, y que no pasa sòlo por la pràctica y el gobierno de cada grupo, sino por lo que verdaderamente es: vida que se celebra y que se hace encuentro, comuniòn, fiesta y alegrìa.

Silvia